Daniel Johnston - Lousy Weekend

Album: Fun

Hola a todos! Bienvenidos sean a una edición más de Friday Songbird, el blog que no posteó en Viernes por enésima vez por encontrarse rodeado de cumpleaños durante el fin de semana 😅. En esta ocasión traemos a sus oídos una canción agridulce, de un artista que hace poco dejó este mundo, y dejó además la evidencia de su talento, un talento que se sobrepuso a una condición mental nada favorable. Con ustedes, Daniel Johnston.

El artista: Nacido en Sacramento en 1961, Daniel Johnston comenzó a crear música desde muy pequeño, con la ayuda de una radio grabadora y un piano o un órgano de cuerdas; esta forma inicial de grabar sus composiciones, limitada al inicio por lo que un niño de 10 años podía conseguir, terminaría por convertirse en parte inconfundible de su estilo, uno de sencillez, baja fidelidad y voz que por lo levemente disonante le da un aire de autenticidad a sus canciones. Después de mudarse a Austin, Texas, su música empezó a llamar la atención, en parte gracias a sus propios esfuerzos (solía repartir cintas con sus temas grabados). A mediados de los 80s gano algo de exposición gracias a algunas secuencias grabadas para MTV; sin embargo, fue en la época de la banda grunge Nirvana que se hizo popular con el público en general, ya que Kurt Cobain solía aparecer en público vistiendo un polo adornado con la portada del disco Hi, How Are You, grabado por Johnston en el 83. A mediados de los 90s ya había una competencia entre disqueras por ver quién produciría el siguiente álbum de Johnston.

Sin embargo, el talento que tanto atraía a las disqueras tenía una contraparte oscura: Johnston sufría de trastorno bipolar, y de hecho en la época en que las disqueras comenzaban a pelearse por él, él estaba internado en un hospital psiquiátrico después de un episodio psicótico que puso en riesgo su vida. En el documental del 2005 The Devil and Daniel Johnston, se retrata vívidamente su trastorno bipolar, el cual, lejos de limitar su arte, lo hace lo que es: la estética lo-fi y el estilo descarnado de su voz son tal vez un reflejo de su condición. Como cuenta Gustavo Faverón en este gran post en Facebook, Daniel Johnston "no interpretaba sus canciones: sus canciones interpretaban su mente".

La canción: forma parte del álbum Fun, del año 1994, y tiene el estilo vocal característico de Johnston acompañado por una guitarra acústica y por momentos un violín puntuando una canción que suena muy alegre y upbeat, pero que paradójicamente habla de un fin de semana terrible, en el que no encontramos a los amigos, la gente nos mira mal y los teléfonos suenan, pero cuando corremos a contestarlos no hay nadie del otro lado.
(Inevitable pensar que esta contradicción no es mas que un pequeño reflejo de la gran contradicción que formaban el talento de Johnston y su enfermedad mental)

cómo así la descubriste?: pues la verdad que no recuerdo, porque fue hace mucho tiempo 😅, pero si recuerdo haber compartido el video de la canción allá por el 2012; si tuviera que hacer un esfuerzo, diría que la encontré vía Twitter, que en ese tiempo se convirtió en una fuente inesperada de buenas canciones.

qué es lo que más te gusta de la canción?: Me encanta su ritmo sencillo y alegre, y cómo el violín le suma a ese sonido y la hace aún más alegre, pegajosa; es una canción que provoca cantar. Pero también me llama mucho la atención como detrás de toda esa onda alegre hay una letra que habla de algo feo, como un fin de semana desastroso; es casi como si la alegría de la canción fuera un antídoto frente a las malas circunstancias, una forma de procesarlas.

algo más?: claro, siempre 😉 Aparte de bucear en su abundante discografía, pueden buscar el álbum The Late Great Daniel Johnston: Discovered Covered, que tiene en la primera mitad covers de las canciones de Johnston por artistas como Eels, TV on the Radio y Beck, y en la segunda mitad las canciones interpretadas por él mismo.

Eso es todo por esta semana, que espero que les esté tratando bien. Que la música los acompañe, y nos vemos la próxima semana! 🤘🏽🤘🏽